La casa se encuentra muy próxima a los grandes núcleos urbanos del área metropolitana central de Asturias (apenas a 40 minutos por carretera de Oviedo o Gijón). Y una buena alternativa a pasear por un frondoso bosque de hayas bajo la lluvia es irse a visitar la capital de Asturias, Oviedo, para disfrutar de una excepcional oferta comercial y cultural de la más alta calidad. Las más importantes joyas del Arte Asturiano (la Cámara Santa de la Catedral, las iglesias del Monte Naranco o Santullano, la Fuente de la Foncalada…) se concentran allí; también es obligada la visita del Museo de Bellas Artes de Asturias o asistir y disfrutar de cualquiera de los numerosos conciertos de música que tengan lugar en alguno de los ciclos programados a lo largo del año (sinfónica, de cámara, ópera, zarzuela, etc.)
También la villa de Gijón es una buena opción, con el marinero barrio de Cimavilla, la playa urbana y el fantástico paseo del Muro de San Lorenzo, o el puerto deportivo, donde se ubica el Acuario y el Centro de Talasoterapia. Sin olvidar la villa de Avilés, con su Centro Niemeyer y un sobresaliente casco histórico.